DECLARACIONES
Lenihan: «¿Por qué vamos a tener un sistema que no ha funcionado?»
Monseñor Lenihan insta a la conversión del corazón y rechaza el socialismo, enfatizando la importancia de la democracia.
Honduras.- El arzobispo de San Pedro Sula, monseñor Miguel Lenihan, ha emitido un mensaje sobre la actualidad política y social de Honduras, abordando temas fundamentales como la corrupción, el sistema político y la importancia de la democracia.
En su declaración, el líder religioso no solo señaló la persistencia de la corrupción como un mal arraigado en la sociedad, sino que también resaltó la necesidad de una profunda conversión del corazón para erradicar este flagelo.
En palabras del arzobispo Lenihan, “La corrupción nace del mal y cuando no hay una conversión del corazón, no hay conversión del país”.
Bajo este pensar, monseñor pidió que “cambiemos el corazón, que releguemos el mal y construyamos un país con mucha justicia, honradez y mucha dignidad”.
Ante las inquietudes sobre el rumbo político de Honduras, monseñor Lenihan fue enfático al descartar la viabilidad del socialismo como sistema político para el país.
Basándose en la experiencia histórica, señaló que el socialismo ha demostrado ser un modelo fallido en diversas naciones, destacando el caso de Venezuela como ejemplo paradigmático de sus fracasos.
En este contexto, instó a mantener y fortalecer la democracia como el sistema político idóneo para Honduras.
También agregó que se debe orar mucho por la actual mandataria, porque muchas veces, en la que, aunque alguien tenga buenas intenciones, se rodean de otras personas que no tienen buenas intenciones para el país, por ello hay que pedir por Castro, para que Dios y la Virgen de Suyapa la guíen.
“Vamos a orar mucho por la presidenta para que ella también pueda llevar a adelante su gobierno y guiar este pueblo”.
Asimismo, el arzobispo hizo un llamado a la unidad y la colaboración, destacando la importancia de cuidar las relaciones diplomáticas y de respeto mutuo con países aliados como Estados Unidos.
Lamentó los recientes comentarios irrespetuosos hacia la embajadora estadounidense Laura Dogu, recordando la importancia de la educación y la tolerancia en la sociedad hondureña.
“Tenemos que cuidar nuestros amigos y aliados, es triste cuando escuchamos estos comentarios, pero sabemos que vivimos en un país donde muchas veces hay falta de educación y respeto por los demás, es trabajo de las escuelas y la iglesia educar para que haya personas más respetuosas y más tolerantes”, acotó.
En cuanto al ámbito de la salud, monseñor Lenihan expresó su preocupación por las necesidades del sistema sanitario y abogó por un trato equitativo hacia todos los profesionales médicos, tanto nacionales como extranjeros.
Enfatizó la importancia de reconocer y valorar el trabajo de los médicos hondureños, sin menospreciar la contribución de otros profesionales de la salud.
En última instancia, el arzobispo reiteró su llamado a la transformación personal y social, subrayando que solo a través de un cambio de corazón y la erradicación del mal será posible construir un país más justo, honrado y digno para todos sus ciudadanos.