Pastor evangelico quiere que se modifique el artículo 77 de la constitución hondureña para participar en política

Aunque la Constitución hondureña prohíbe la participación de religiosos en temas políticos, por ser Honduras un estado laico, algunos pastores evangélicos y sacerdotes en la clandestinidad realizan activismo político e incluso inciden en decisiones dentro del estado hondureño.

Es así como que el pastor evangélico, conocido como Mario Tomas Barahona, ha comenzado una cruzada en pro de modificar el articulo 77 de la Constitucion de la Republica de Honduras que prohíbe que personas como él participen o hagan activismo político.

“Hoy en día estamos solicitando que se elimine ese artículo para que cualquier ciudadano tenga un llamado no se limite en su participación” declaró el líder religioso a una radioemisora de la capital de Honduras.

Segun lider religioso el articulo 77 que les prohíbe hacer política no tiene claridad y debe de ser reformado como también varios artículos de la constitución deben de ser corregidos .

También declaró que actualmente están formando varios líderes en todo Honduras para que tengan la capacidad de gobernar nuestro país como rectitud y objetividad.

“Como ciudadano hondureño tengo derecho a elegir y ser electo y como iglesia evangélica estamos trabajando a nivel nacional formando la familia hondureña”, indicó.

Negó que todos los pastores estén buscando la manera de participar en política, aunque admitió que algunos tienen esa pasión.

“Estamos interesados en levantar una nueva generación, no es que los pastores anden buscando participar aunque algunos tengan ese llamado por Honduras”, apuntó.

Actualmente el articulo 77 de la Constitucion de Honduras prohíbe la participación de líderes religiosos en asuntos políticos y se lee de la siguiente forma:

Artículo 77 : Se garantiza el libre ejercicio de todas las religiones y cultos sin preeminencia alguna, siempre que no contravengan las leyes y el orden público.

Los ministros de las diversas religiones, no podrán ejercer cargos públicos ni hacer en ninguna forma propaganda política, invocando motivos de religión o valiéndose, como medio para tal fin, de las creencias religiosas del pueblo.

Advertisement