Policía recupera sano y salvo a recién nacido robado en el hospital Mario Catarino Rivas

Tras una rápida y efectiva labor investigativa ejecutada en la zona norte del país, la Dirección Policial de Investigaciones (DPI) ha logrado rescatar sano y salvo a un recién nacido que había sido privado de su libertad en el hospital Mario Catarino Rivas.

Durante el operativo se logró arrestar de manera flagrante a una de las secuestradoras involucradas en el delito, cuando se disponía abordar un vehículo para huir de la ciudad con la bebé y evadir la justicia.

Tras recibir la denuncia, los agentes de la Unidad Nacional Antisecuestro (UNAS) de la DPI actuaron de inmediato, iniciando una exhaustiva investigación para dar con el paradero del recién nacido y los responsables del secuestro.

Gracias a labores de rastreo, análisis de información y trabajo de inteligencia, se logró identificar y ubicar a una de las personas implicadas en el secuestro, en la ciudad de San Pedro Sula, Cortés.

La sospechosa es una ama de casa de 40 años, originaria de Copán y residente en el mismo lugar donde se originó la detención.

Con la información recopilada, se planificó y llevó a cabo una investigación exhaustiva, a fin de rescatar y detener a los responsables, garantizando la integridad y seguridad del menor.

Los secuestradores exigian más de 100 mil lempiras, a cambio de dejar en libertad al infante.

Los agentes de la Unidad Nacional Antisecuestro pondrán a la fémina a disposición de las autoridades del Ministerio Público, para que responda por el delito que se le imputa en su contra.

El arresto de esta persona permitirá avanzar en la investigación y desmantelar posibles redes criminales involucradas en el secuestro de menores que operan en la zona norte del territorio hondureño.

Cabe señalar que, el recién nacido fue atendido por personal médico para garantizar su estado de salud y bienestar, donde posteriormente será entregada a sus familiares, quienes podrán reunirse con el menor.

En ese sentido, la DPI continuará trabajando para identificar y capturar a los demás responsables del secuestro, con el objetivo de llevarlos ante la justicia y que reciban las sanciones penales correspondientes.

Asimismo, se realizarán las diligencias necesarias para desarticular cualquier red que esté involucrada en este tipo de delitos.

Este rescate exitoso demuestra el compromiso y la capacidad de respuesta de la DPI, en la protección de los derechos de los menores y la lucha contra los delitos que atentan contra su seguridad.