Crucero explora 6 destinos turísticos hondureños

El crucero Le Dumont-d’Urville de Ponant traza una ruta por seis destinos de Honduras, abriendo un horizonte de expectativas económicas y sociales con proyectos de desarrollo en comunidades costeras.

Honduras.- El lujoso crucero Le Dumont-d’Urville, insignia de la empresa francesa Ponant, ha desencadenado una ola de expectación al iniciar su travesía por seis enclaves turísticos hondureños en el Caribe.

Esta odisea promete no solo una experiencia única para los 200 pasajeros que se sumaron en Puerto Cortés, sino también un impacto significativo en la economía y el desarrollo social de la región, según ha confirmado el Instituto Hondureño de Turismo (ITH).

La ruta contempla paradas en destinos icónicos como Punta Sal, Guanaja, Utila, los Cayos Cochinos y la reserva de Cuero y Salado.

En particular, la llegada del crucero a Guanaja marcará un hito histórico, ya que será su primera visita desde aquel lejano día en que fue descubierta por Cristóbal Colón en 1502.

El viceministro de Turismo, Luis Chévez, compartió una visión entusiasta sobre el impacto inminente de esta travesía.

«La Fundación Ponant llevará a cabo un proyecto para impulsar el desarrollo social en Cayos Cochinos y Cuero y Salado, con la construcción de centros educativos. Esto representa un avance significativo en estas comunidades, ofreciendo oportunidades que perdurarán más allá de la visita del crucero», afirmó.

Se estima que la presencia del Le Dumont-d’Urville generará un impacto económico de alrededor de 500.000 dólares durante su estadía en Honduras.

Con un cálculo aproximado de 370 dólares por pasajero, se prevé un flujo constante de inversión local durante las siete semanas de su visita.

Los ingresos provenientes del turismo de cruceros son un componente esencial para la economía hondureña, siendo los puertos del Caribe los más beneficiados.

Roatán, reconocido como uno de los principales destinos turísticos del país centroamericano, se destaca como uno de los puertos más relevantes, seguido por Puerto Cortés y Trujillo.

La inclusión de Amapala, en la Isla del Tigre, en el Golfo de Fonseca, agrega diversidad a esta ecuación turística.

El periodo de cruceros, que se extiende de noviembre a marzo, constituye un pilar financiero vital para Honduras, generando ingresos superiores a los 100 millones de dólares, según fuentes oficiales.