Formal procesamiento y prisión preventiva para fiscal Medina por 41 delitos

Fiscal Medina enfrenta procesamiento y prisión preventiva por 41 delitos tras sustraer 88.6 millones de lempiras del Banco Central de Honduras. Acusada de lavado de activos y falsificación de documentos, entre otros.

Honduras.- Tras una audiencia inicial en el Juzgado de lo Penal en Materia de Criminalidad Organizada y Corrupción de San Pedro Sula, la fiscal Francia Sofía Medina enfrenta un auto de formal procesamiento por 41 delitos.

Este decisivo paso judicial surge a raíz de la sustracción de 88.6 millones de lempiras de las bóvedas del Banco Central de Honduras.

La contundente resolución decretada por el tribunal sampedrano implica no solo el procesamiento formal de la fiscal Medina, sino también su inmediata detención y reclusión en la cárcel de Támara, además de la suspensión de su cargo como fiscal auxiliar del Ministerio Público.

Los cargos que pesan sobre Medina son abrumadores e incluyen acusaciones de lavado de activos, sustracción y manipulación de documentos oficiales, uso de información privilegiada, enriquecimiento ilícito y múltiples cargos por falsificación de documentos públicos, afectando gravemente la integridad socioeconómica, administrativa y la fe pública del Estado hondureño.

El portavoz de los juzgados sampedranos, Ruy Gabriel Barahona, ha explicado que aunque se notificó a las partes procesales sobre la resolución de este lunes, el caso permanece bajo estricto secreto debido al continuo seguimiento de las diligencias investigativas.

Según Barahona, en el proceso se admitieron 22 medios de pruebas documentales, un informe pericial y un testimonio, pero se rechazaron videos como evidencia. Esta medida resalta la meticulosidad con la que se ha llevado a cabo el proceso judicial.

Las investigaciones realizadas por equipos especializados de la Agencia Técnica de Investigación Criminal (ATIC) revelan que la fiscal Medina efectuó los retiros millonarios sin informar a las autoridades superiores del Ministerio Público durante un lapso de dos años, dando lugar a la sustracción de fondos que estaban resguardados como evidencia en la bóveda del Banco Central de Honduras.

Este revés judicial, marcado por la detención y procesamiento de una alta funcionaria del Ministerio Público, resalta la necesidad urgente de una investigación exhaustiva y transparente para esclarecer la magnitud de este caso que ha conmocionado a la opinión pública y pone de manifiesto la importancia de salvaguardar la integridad y el correcto funcionamiento de las instituciones estatales.