Inicia audiencia crucial sobre la inhabilitación electoral de Trump

Tribunal Supremo de EE.UU. sopesa la posible inhabilitación de Trump para futuras candidaturas presidenciales por su papel en el asalto al Capitolio.

Washington. DC.- En una jornada que podría dejar una marca indeleble en el panorama político estadounidense, la audiencia en el Tribunal Supremo de Estados Unidos para determinar si el expresidente Donald Trump enfrentará la inhabilitación para postularse nuevamente a la Casa Blanca.

Debido a la presunta implicación del mandatario norteamericano en el asalto al Capitolio de enero de 2021 ha dado inicio este jueves en la sede del máximo tribunal del país.

El telón se alzó alrededor de las 10:10 hora local (15:10 GMT) para esta trascendental sesión, durante la cual los nueve jueces del tribunal escucharán atentamente los argumentos orales para determinar la constitucionalidad de la expulsión de Trump de las primarias republicanas en el estado de Colorado.

Horas antes del inicio de la sesión, el exmandatario reiteró sus acusaciones contra el Partido Demócrata, denunciando un supuesto intento de eliminarlo de la contienda electoral a través de medios legales.

En un comunicado, Trump hizo un llamado a sus seguidores para que se unan y defiendan su inclusión en la papeleta electoral, describiendo este proceso como el mayor desafío legal que ha enfrentado.

La decisión del Tribunal Supremo, aunque no se espera para el día de hoy, podría tener repercusiones significativas en las elecciones presidenciales previstas para noviembre próximo, donde Trump figura como el favorito indiscutible para obtener la nominación republicana y enfrentarse nuevamente al actual presidente, Joe Biden, candidato del Partido Demócrata.

Dada la urgencia impuesta por el inminente calendario electoral, se espera que el tribunal se pronuncie con premura.

Sin embargo, los expertos legales dudan de que se emita un fallo antes del «supermartes» del 5 de marzo, cuando 15 estados, incluido Colorado, llevarán a cabo sus primarias.

El actual balance de poder en el tribunal, con una mayoría conservadora de seis jueces frente a tres progresistas, plantea interrogantes sobre el posible desenlace del caso.

Aunque tres de los jueces conservadores fueron nominados por el propio Trump, la corte no siempre ha respaldado sus intereses, como se evidenció en su rechazo a las denuncias de fraude electoral del año 2020.

El punto central del debate radica en la interpretación de la Sección 3 de la Enmienda 14 de la Constitución de Estados Unidos.

Esta disposición, concebida en 1868 tras la guerra civil, prohíbe que aquellos que hayan participado en una insurrección o rebelión puedan ocupar cargos públicos, incluida la presidencia.

Sin embargo, la defensa de Trump argumenta que la enmienda no se aplica directamente a la figura del presidente, mientras que sus detractores sostienen lo contrario, basándose en su presunta incitación a la violencia durante el asalto al Capitolio.

Este caso marca un hito en la historia judicial de Estados Unidos, siendo la primera vez que el Tribunal Supremo aborda un tema relacionado con la Sección 3 de la Enmienda 14, un texto que había quedado prácticamente en desuso desde que el Congreso otorgara amnistía a la mayoría de los rebeldes confederados en 1872.