Más de 30 mil jóvenes dejan huella de amor gigante en Danlí

El evento tuvo lugar en el campus Santiago Apóstol de la Universidad Católica de Honduras (Unicah).

Participaron jóvenes de todo el país y delegaciones internacionales como Nicaragua, El Salvador y Guatemala.

Desde la pandemia, no se había reunido a tantos peregrinos juveniles en un solo lugar.

La Diócesis de Danlí fue la anfitriona del evento, recibiendo a los participantes con un programa lleno de actividades.

Entre ellas, destacó el recorrido al Cerro de la Cruz, una réplica de la cruz de Krizevac en Medjugorje, donde la Virgen de la Paz envía sus mensajes.

El evento incluyó la misa de apertura y clausura, y una concentración de jóvenes en el centro histórico de Danlí, que resultó insuficiente para la cantidad de asistentes.

Las 11 diócesis del país y cientos de parroquias participaron, junto a la jerarquía católica que acompañó la vigilia.

“Jóvenes caminantes dejando huellas de amor gigante” fue el lema del encuentro.

Inicio de la jornada

Desde el viernes por la noche, se recibieron las primeras delegaciones.

El sábado por la mañana, tras la celebración eucarística, se realizó una caminata desde la Universidad Católica hasta el cerro de Las Colinas, iniciando el Vía Crucis hacia la cruz más grande de Centroamérica, dirigida por el obispo José Antonio Canales.

La noche fue de alegría, lágrimas y meditación, culminando con juegos pirotécnicos que anunciaron la sede de la próxima Jornada Nacional de la Juventud en 2026, en Yoro.

La actividad principal fue una vigilia donde los jóvenes reafirmaron su compromiso con la iglesia y la sociedad hondureña.

Este encuentro de la feligresía católica, pospuesto por cuatro años debido a la pandemia, se retomó con éxito y deja una huella imborrable en los asistentes.

La Jornada Mundial de la Juventud es el evento católico más grande para la juventud hondureña, con el objetivo de que los jóvenes encuentren a Cristo y transformen sus vidas.

Sacerdotes y obispos acompañaron a los jóvenes en este espacio de evangelización.

11 diócesis de todo el país se hicieron presentes en Danlí.

Cita para 2026 en Yoro

Desde ya, se trabaja en la próxima Jornada Nacional de la Juventud, que se desarrollará en dos años en la Diócesis de Yoro, donde se espera superar la asistencia de este año.

El evento promete seguir siendo un espacio de encuentro y espiritualidad para la juventud católica de Honduras y de países vecinos.

La Jornada Nacional de la Juventud no solo representa un momento de fe y renovación espiritual, sino también una oportunidad para fortalecer la comunidad y fomentar la solidaridad entre los jóvenes.

La organización ha comenzado a preparar el terreno para el próximo encuentro, asegurando que la experiencia sea aún más enriquecedora y significativa.

El éxito de la jornada en Danlí es un testimonio del compromiso de la juventud con los valores cristianos.

Así como su deseo de contribuir positivamente a la sociedad.

Los organizadores, satisfechos con la alta participación, ya están planificando actividades previas para mantener el entusiasmo y la conexión entre los jóvenes hasta el próximo encuentro en Yoro.

Este evento ha dejado una huella imborrable en los corazones de los participantes, quienes regresaron a sus hogares inspirados y con una renovada fe.

La Jornada Nacional de la Juventud continúa siendo un faro de esperanza y unidad para la juventud católica de la región.

Reafirmando su misión de evangelización y servicio comunitario, de una iglesia caminante.