Este martes la embajada de los Estados Unidos en Irak, fue atacada por manifestantes, quienes prendieron fuego a la valla que protege el complejo e ingresaron a su territorio, incendiando el puesto de control de la misión diplomática estadounidense.
El hecho se dio en forma de protesta, tras los recientes ataques aéreos de Estados Unidos contra las bases de la milicia chiita Kataib Hezbolá (KH), en los cuales, perdieron la vida 25 miembros.
Luego del incendio, los oficiales de la Marina estadounidense lanzaron gases lacrimógenos a los protestantes, para disipar la manifestación.
Por su parte, el presidente de EE.UU. Donald Trump acusó a Irán de planificar el ataque contra la sede diplomática y advirtió que la República Islámica «pagará un precio muy grande».