Edwin Amaya, un hondureño de 29 años y padre de uno de los hijos de Brenda Hernández, atropelló intencionalmente a Brenda el pasado sábado por la noche en Pompano Beach, Florida.
La joven madre dejó tres hijos, de 10, 12 y 2 años, quienes presenciaron el terrible incidente.
Según testigos y familiares, Amaya llegó a la casa de Brenda en Florida bajo los efectos del alcohol y las drogas, exigiendo llevarse a su hijo de dos años. Al no lograrlo, amenazó con «matarlos a todos a tiros» y regresó a su vehículo en busca de un arma.
Sin embargo, en lugar de usarla, atropelló a Brenda intencionalmente en dos ocasiones con su camioneta Ford F-250. Un video grabado por un testigo y vecino de la zona se considera evidencia y muestra los momentos previos al incidente.
La relación entre Brenda y Amaya había estado marcada por la violencia y el maltrato. Brenda había solicitado una orden de alejamiento que él nunca respetó, acosándola constantemente con diferentes números telefónicos, según declaró la madre de Brenda a las autoridades. Tras el ataque, llevaron a Brenda al Broward Health North, donde falleció.
Mientras tanto, la policía arrestó a Amaya y lo trasladó a la cárcel principal de Fort Lauderdale, donde enfrenta un cargo de asesinato premeditado y permanece detenido sin derecho a fianza.