Llamado urgente de la ONU: Diálogo y legalidad para Honduras

La ONU, a través de su coordinadora residente, Alice Shackelford, insta a Honduras a un diálogo basado en legalidad y Estado de derecho. La polarización política y el desacuerdo en el Congreso exigen una solución urgente para garantizar la estabilidad nacional.

Honduras.- En medio de una creciente polarización política en Honduras, la Organización de Naciones Unidas (ONU) ha emitido un llamado enfático a favor del diálogo basado en la legalidad y el Estado de derecho.

La coordinadora residente de la ONU en el país, Alice Shackelford, ha señalado la urgencia de corregir información mal manejada con tintes políticos que afectan el rumbo democrático de la nación.

«Estamos pendientes de un intercambio de la Secretaría de las Naciones Unidas y el Gobierno de Honduras y acordar el próximo paso»

El punto central de esta situación se relaciona con la instalación de la Comisión Internacional contra la Impunidad en Honduras (CICIH), una promesa de campaña crucial de la presidenta Xiomara Castro.

A pesar de los esfuerzos, Shackelford ha destacado la necesidad de alcanzar un consenso entre la Secretaría de las Naciones Unidas y el Gobierno de Honduras para avanzar en este tema.

«Seguimos haciendo un llamado a un diálogo respetuoso, basado en el Estado de derecho y legalidad. Y que pueda asegurar que el Congreso pueda ir adelante en su trabajo»

El llamado al diálogo se vuelve aún más apremiante dado el escenario político interno. El Congreso Nacional se encuentra dividido, con un oficialismo operando desde una Comisión Permanente que funciona únicamente durante los recesos legislativos, mientras que la oposición ha convocado sesiones extraordinarias, extendiendo el periodo de sesiones para cuestionar la validez de dicha Comisión Permanente.

La falta de consenso político y la discrepancia entre los poderes han generado una atmósfera de incertidumbre legal y política en el país.

En este contexto, Shackelford ha exhortado a todos los sectores a priorizar el interés colectivo de Honduras sobre intereses individuales o partidistas.

El llamado a la responsabilidad y al diálogo respetuoso resuena como un requisito indispensable para garantizar la estabilidad jurídica, política y social del país.

La búsqueda de una solución consensuada y legalmente sólida se alza como la prioridad máxima. La coordinadora residente ha enfatizado la necesidad de que la clase política hondureña asuma su responsabilidad moral y legal en la búsqueda de una senda común que beneficie a la nación en su conjunto.