Ambiente
CODEH: Decreto 28-94 define a la Isla del Cisne como área protegida
El conflicto por la Isla del Cisne continúa: ¿Área protegida o sitio para una mega-cárcel? CODEH y gobierno discrepan.
Honduras.- El Comité para la Defensa de los Derechos Humanos en Honduras (CODEH) ha alzado su voz en defensa de la Isla del Cisne, tras la intención del gobierno de construir una mega cárcel en dicha isla.
Según el presidente del CODEH, Hugo Maldonado, el Decreto 28-94, publicado en el diario oficial La Gaceta número 27,477, establece claramente que la Isla del Cisne es un área protegida.
El Decreto 28-94, publicado el lunes 17 de octubre de 1994, estipula que la Isla del Cisne debe ser preservada debido a su valor ecológico y ambiental.
Este decreto impone al gobierno la responsabilidad de proteger la isla, prohibiendo cualquier actividad que ponga en riesgo su integridad ecológica.
Posición del CODEH
Maldonado enfatiza que, al ser un área protegida, la construcción de una cárcel de máxima seguridad contravendría las disposiciones del decreto.
Además, insta a que cualquier licencia ambiental otorgada para este proyecto sea suspendida hasta que se resuelva el conflicto.
Según Maldonado, «La construcción de una cárcel no es viable ni para el ambiente, ni para los derechos humanos».
Disputa gubernamental
Por otro lado, varios funcionarios del gobierno sostienen que la Isla del Cisne no está bajo la categoría de área protegida.
Esta afirmación ha sido parte de una campaña gubernamental para legitimar la construcción de la prisión.
El secretario de Estado en el despacho de Recursos Naturales y Ambiente (Serna), Lucky Medina, confirmó hoy que el acuerdo de declaratoria, el cual define como área protegida a las Islas del Cisne, nunca se publicó en el Diario Oficial La Gaceta.
«Si nos vamos a lo estrictamente legal, Islas del Cisne nunca fue declarado como área protegida. El acuerdo de declaratoria nunca se publicó en la Gaceta, eso fue en el 1991»
No obstante, la documentación oficial del Decreto 28-94 parece contradecir estas afirmaciones.
La disputa sobre la categoría de protección de la Isla del Cisne no es meramente legal, sino que también tiene profundas implicaciones ambientales y de derechos humanos.
La construcción de una cárcel podría causar daños irreversibles al ecosistema de la isla.
Además, plantea preocupaciones sobre el respeto a los derechos humanos en el contexto de la preservación del medio ambiente.
El debate sobre la Isla del Cisne pone de relieve la necesidad de una evaluación cuidadosa y transparente de los proyectos gubernamentales en áreas ecológicamente sensibles.